Vino de Europa y tenía sed de conocer, había estudiado escultura en una de esas universidades que hay allá, vos sabés. Me dijo -ahí es donde todo esto me llamó la atención- Me dijo que su viejo la tenía toda, y yo dije - En ese caso, voy a tomar un Criadores - Ella dijo – está bien – y a los treinta segundos soltó – quiero vivir como la gente común, quiero hacer lo que sea que hace la gente común, quiero acostarme con gente común, cogerme gente común, como vos – Bueno. Qué más podía hacer. - Voy a ver / qué puedo hacer – La llevé a un supermercado, no se por qué, pero por algún lado había que empezar, así que empezó por ahí. Le dije hacé de cuenta que no tenés un peso y ella se rió – sos tan gracioso – - ¿Sí? ¿Ves a alguien riéndose por acá? ¿Estás segura que querés vivir como la gente común, que querés hacer lo que hace la gente común, que querés acostarte con gente común, como yo?- Pero ella no entendió, me agarró la mano y sonrió. Alquilá un cuartito arriba de un local, cortate el pelo y conseguí algo de qué trabajar. Fumate unos cigarros, jugá al pool, hacé de cuenta que no recibiste educación. Pero igual nunca vas a saber, porque cuando te vayas a acostar, y te quedés mirando las cucarachas que te llenan el lugar, siempre vas a saber que si llamás a tu papá, él te va a poder salvar – Nunca vas a ser como la gente común, ni vas a hacer lo que hace la gente común, nunca vas a fracasar como la gente común, nunca vas a ver a tu vida desencajarse de todo, y sólo bailar, curtir y escabiar porque no hay lugar nada más. Así que cantá con la gente común, porque así tal vez algo se te pega, reíte con la gente común, reíte aunque se estén riendo de vos y las cosas estúpidas que hacés, porque pensás que ser pobre es cool.
